La invención de Morel

Título: La invención de Morel.

Autor: Adolfo Bioy Casares.

Año de publicación: 1940.

Año de edición: 2017.

Editorial: Ediciones Norma.

Idioma original: español.

Número de páginas: 96.

La invención de Morel, libro escrito a modo de diario, es un texto en el que el protagonista registra las vivencias que ha tenido como consecuencia de un suceso inesperado, el cual denomina “un milagro”: el sonido de un fonógrafo y la presencia de más personas en la isla en la que se encontraba. Su estancia ahí resulta extraña ya que se trataba de un lugar que, aunque contaba con ciertas construcciones, estaba abandonado y desierto hace mucho tiempo, a causa de una enfermedad que mataba a sus visitantes de adentro hacia afuera, haciendo que su cuerpo se destrozara poco a poco y no lograran sobrevivir más de quince días.

Intrigado y sin saber si esas personas están en la isla para buscarlo, dado que es un fugitivo, el narrador se va acercando con cautela a los “intrusos” para averiguar los motivos de su visita. Es así como empieza a registrar en su diario lo que ve, lo que piensa al respecto y, por supuesto, todo lo que hace para estar cerca de Faustine: la mujer de quien se enamora. Siguiendo su propósito de conquistarla, el protagonista descubre que algunas cosas cambian desde la llegada de esas personas, pero su gran descubrimiento gira en torno a la invención de Morel. El hallazgo de dicha invención y sus sentimientos por Faustine lo impulsan a tomar ciertas decisiones, que cuestionan al lector en torno al verdadero significado de la vida, la muerte, lo real y lo humano.

La narración en primera persona permite que el lector se introduzca en la realidad del personaje desde su perspectiva. Sin embargo, aunque son muy pocas, a lo largo del relato encontramos algunas notas del editor que cuestionan la veracidad de dicha mirada, llevando al lector a dudar al respecto. Además, hay ciertos puntos de la narración en los que el protagonista se cuestiona si sus experiencias realmente tienen lugar o son producto de su imaginación, posibilitando que el lector experimente vacilación y, así como el protagonista, se cuestione si se trata de locura o fantasía.

Te invitamos a leer La invención de Morel y, teniendo en cuenta la posición en la que Todorov sitúa lo fantástico, te preguntes si los hechos se deben a la locura del protagonista, si tienen una explicación coherente o si, por el contrario, se trata de lo maravilloso.