Título: Meridia. El cristal de la guardiana.
Autor: P. C. Cuéllar.
Año de publicación: 2020.
Editorial: Montena.
Idioma original: español.
Número de páginas: 316.
En el primer tomo de la trilogía Meridia, El cristal de la guardiana, conocemos a Antonia, una geóloga que decide vivir su vida motivada por sus sueños y metas profesionales. Debido a esto, su vida resulta ser un constante ir y venir entre diversos países del mundo, con el fin de recolectar muestras y hacer los estudios necesarios para su labor.
Sin embargo, aunque en su trabajo parecía seguir un rumbo muy claro, es en uno de sus viajes que su vida, como la conocía, cambia para siempre. A causa de un temblor, pero sin ser muy consciente sobre cómo, Antonia se cae y todo cambia. No solo se da cuenta que está en un lugar que no aparece en el mapa, sino que, además, tiene un encuentro con una mujer que, en sus últimos minutos de vida, le entrega un cristal y le pide que lo cuide de los enemigos que van tras él. Sin tiempo para reaccionar, Antonia acepta el cristal, ve morir a la mujer y, como puede, se defiende de aquellos que parecen ser los enemigos, hasta que otro grupo llega en su ayuda. Cuando despierta, se encuentra en un hospital, rodeada de sujetos que, aunque tienen la apariencia física de los humanos, no hablan un idioma conocido ni sienten de la misma forma: los meridios. Es allí donde empieza su descubrimiento de esa civilización, de sus habitantes y, por supuesto, del cristal que le fue entregado y su significado.
Desde la perspectiva de Antonia, compartiendo su encuentro con Meridia y su descubrimiento de este lugar y sus habitantes, encontramos una civilización que decidió alejarse de los humanos por ser impredecibles, violentos y destructivos. Y, si bien no está ubicada en otro mundo, hizo uso de su tecnología avanzada para crear una barrera imperceptible que hace invisible a su civilización para los ojos humanos. Una civilización que recuerda a Wakanda. Además de ello, vemos los primeros indicios de un romance entre la protagonista y un meridio en medio de diversas situaciones que Antonia debe vivir al estar allí.
En esta historia, P. C. Cuéllar juega con referentes cotidianos y actuales tales como El hombre araña, algunas producciones de Disney, Caballeros del zodiaco, entre otros, para dejar claro que, si bien se trata de un espacio desconocido, el lector se acerca a este a través de una humana con experiencias que pueden ser comunes a las del lector, incluso si se trata de mundos fantásticos.
Adicionalmente, la autora dedica gran parte del libro a descripciones detalladas sobre el espacio y los personajes, lo cual suele ser común cuando se trata de un lugar que no hace parte de los referentes comunes que compartimos como humanidad y, asimismo, cuando es el primer volumen de una trilogía. Relacionado con ello, el libro termina con cabos sueltos que dejan al lector preguntándose sobre el futuro de la protagonista en la civilización meridia, sobre su relación con el meridio, sobre el hallazgo de una cura anhelada, entre otros.
Conectado con lo anterior, el libro, al ser una primera parte, amerita en algunas ocasiones una mayor explicación del contexto histórico que da sentido a la separación por parte de los meridios de los humanos, ya que la protagonista asume cosas que para el lector quedan como preguntas abiertas. Además, el desarrollo de los personajes podría tratarse de una manera más lenta, puesto que hay cambios en las relaciones que ocurren demasiado rápido, lo cual puede deberse a la extensión del texto. Ahora bien, hay que tomar estos comentarios con pinzas, ya que sabemos que se trata de una saga de tres libros en la cual el mundo y la historia del mismo seguirán desarrollándose.
Esta obra, escrita por la autora colombiana P. C. Cuéllar, te abrirá el camino hacia una civilización que, si bien comparte costumbres y rasgos característicos de la raza humana, se diferencia en otros aspectos que los hacen particulares y que invitan a explorar su contexto y sus formas de vida. Y, a su vez, acompañan el crecimiento emocional y personal de la protagonista y de otros personajes que se ven en la necesidad de replantearse sus prejuicios en torno a lo “diferente”.
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